¿Es mi hijo(a) un malcriado(a)?

niños malcriados

¿Es mi hijo(a) un malcriado(a)?

No son los regalos ni lo juguetes en exceso lo que provoca que un niño crezca malcriado, sino que es el comportamiento de los padres y la manera de educarlo lo que realmente va a afectar a su futura personalidad.

En ocasiones para evitar tener problemas con los hijos, los padres pueden fácilmente dejarse llevar por sus exigencias y ceder a su manipulación, pero lo único que se consigue con esto es dejarle claro que puede conseguir lo que quiera en el momento que quiera.

Pese a que, en algunas oportunidades, ceder al chantaje puede parecer lo más a apropiado, a la larga la persona que va a sufrir la mala educación de los padres, es el propio niño.

Si tienes un hijo, ¿cómo puedes reconocer que lo estás malcriando?  Aquí van algunas conductas de los padres hacia su hijo(a):

1. Hacer que tu hijo sea el centro del universo

Seguro que quieres lo mejor para tu hijo, pero hacer todo lo que quieran sea tu prioridad en cualquier circunstancia, le enseña que el mundo solo para él. Esto puede tener un efecto negativo en el desarrollo de tu hijo, pues éste puede no considerar las necesidades de otras personas en el futuro. Los niños deben aprender a dar y recibir, no solamente recibir. Además, deben aprender a entender que no todo en la vida se puede conseguir sin esfuerzo. Progresivamente, el niño debe ir liberándose de la actitud egocéntrica.

2. No reforzar su comportamiento positivo

Los padres ocupados pueden no notar cuando su hijo está tranquilo sin hacer nada malo. Si no refuerzas las conductas positivas de tu hijo, puede que no entienda que lo está haciendo bien. 

3. Reforzar conductas negativas

En muchas ocasiones, los padres no solo ignoran las conductas positivas, sino que refuerzan las conductas negativas. Si solo reconoces a tu hijo cuando llora, le envías el mensaje equivocado, ya que es posible que asocie que solo llorando consigue toda tu atención.

4. No poner límites a tu hijo

Si no pones normas y no se las haces cumplir a tu hijo, es posible que crezca siendo maleducado, no cooperativo e irrespetuoso. Los niños pequeños necesitan saber dónde está el límite para que no se conviertan en individuos incivilizados. Parte del trabajo de los padres es enseñar valores sociales, tales como el respeto o la paciencia.

5. No hacer cumplir las normas de modo coherente

Mientras algunos padres no ponen límites al comportamiento de su hijo, otros ponen límites ambiguos o incoherentes. Por ejemplo, un padre que no le deja a su hijo jugar con la comida unos días pero a su hermano mayor sí. Si las reglas que le pones a tu hijo no son coherentes o son ambiguas, esto perjudicará a su aprendizaje de normas.

6. Hacerle regalos a tu hijo cuando no toca

Lo que le regales a tu hijo no es tan importante como el cuándo se lo regales. Por ejemplo, comprarle una bicicleta a tu hijo solamente por el hecho de estar aburrido con la que le regalaste hace dos meses puede enseñarle a no valorar las cosas que tiene o después de un mal comportamiento, el mensaje que se le entrega es equivocado.

7. Ceder a los berrinches

Ceder a los berrinches de tu hijo es una manera de reforzar las conductas negativas, y le enseña a tu hijo que puede conseguir todo lo que quiera llorando, pataleando y con constantes berrinches y salidas de tono, y no dialogando o cumpliendo con sus obligaciones.

8. Actuar como un niño malcriado

Tú eres un modelo para tu hijo, y cómo interaccionas con los miembros de tu familia es algo que puede aprender. Si te comportas de manera infantil delante de tu hijo, es muy posible que piense que esa es la manera de actuar.